Carta de Mike a los políticos de Río Tercero y la Argentina
Lunes, 1 de junio de 2009
Goodbye, GM ...
Goodbye, GM ...
by Michael Moore
Escribo esto en la mañana en que llegó a su fin de la otrora poderosa General Motors.
El Presidente de los Estados Unidos ha hecho oficial: La General Motors, tal como la conocíamos, ha dejado de existir.
Es una triste ironía, la empresa que inventó la "obsolescencia planificada" - hacían coches que se desmoronaban después de unos años para que el cliente tenga que comprar constantemente uno nuevo - se ha hecho obsoleta.
Se negó a construir automóviles de acuerdo a la necesidad de la gente, coches de mejor rendimiento de combustible, con respeto a la seguridad y cómodos en este tráfico tumultuosos [RDPRMC].
GM ha luchado obstinadamente en contra de regulaciones para cuidar el medio ambiente y las normas de mejoramiento de la seguridad vial.
La Automotriz fue un infierno, por el permanente empeño en castigar a sus trabajadores sindicalizados, podando miles de empleos sin otro motivo que no sea, "mejorar" la corporación.
A partir de la década de 1980, cuando GM anuncio su traslado a México y otros lugares, innumerables puestos de trabajos fueron aniquilados y la vida de decenas de miles de personas fue destruida.
Así que aquí estamos en el lecho de muerte de General Motors.
El cuerpo de la empresa aún esta tibio, y me encuentro lleno de alegría.
No es la alegría de la venganza contra una corporación que arruinó mi ciudad natal y trajo la miseria, el divorcio, el alcoholismo, la falta de vivienda, debilidad física y mental por la adicción a las drogas a la gente que creció en ese marco.
Tampoco, obviamente, se siente alegría al saber que más 21.000 trabajadores de GM quedarán también sin trabajo.
Pero usted, yo y el resto de los yankys, ¡poseemos ahora una compañía automotriz!
Lo sé, lo sé – ¿qué humano no quiere ser dueño de una compañía como esta?
Pero... ¿Quién de todos nosotros quiere que $ 50 mil millones de dólares de nuestros impuestos sea arrojado a un agujero negro tratando de salvar a GM?
Seamos claros al respecto: La única manera de salvar a GM es matar a GM.
Sin embargo, otro tema es salvar nuestra magnífica infraestructura industrial y esto debe ser una prioridad absoluta.
Si permitimos el cierre y la demolición de las plantas automotrices, no nos daríamos cuenta lo importante que serían estas para construir sistemas de energía alternativa que ahora se necesitan desesperadamente.
Y cuando nos demos cuenta de que la mejor forma de transportarnos es por ejemplo a través de trenes, trenes ligeros y ómnibus de baja emisión contaminante, ¿cómo vamos a fabricar estos nuevos sistemas si es que hemos permitido que desaparezca nuestra capacidad industrial y su mano de obra calificada?
Por tanto, como la GM esta siendo "reorganizada" por el gobierno federal y el tribunal judicial de quiebra, he pensado en un plan y le pido al Presidente Obama que lo aplique para el bien de los trabajadores, la comunidad de GM, la nación y el mundo todo [RDPRMC]:
1. Igual a lo que hizo el Presidente Roosevelt después del ataque a Pearl Harbor, “el grone” que tenemos de presidente debe informar a la nación que estamos en guerra y urgentemente tenemos que convertir nuestras fábricas de autos en fábricas que construyan vehículos de transporte masivo y dispositivos de energía alternativa. Cómo se hizo en 1942 reconvirtiendo la línea de ensamblaje de GM para construir aviones, tanques y ametralladoras [RDPRMC]. Así es como se derrotó a los fascistas.
Nos encontramos ahora con un tipo diferente de guerra - una guerra contra el ecosistema, al que nos han arrastrado nuestros propios líderes empresariales y gobernantes.
Existen dos frentes de batalla. Uno tiene sus oficinas centrales en Detroit. Los productos construidos en las fábricas de GM, Ford y Chrysler son algunas de las mejores armas de destrucción masiva, responsables del calentamiento del planeta y el derretimiento de los casquetes polares. Los artefactos que llamamos "autos" pueden ser muy divertidos conducirlos y pavonearse en él, pero son como un millón de dagas en el corazón de la Madre Tierra.
Continuar con la fabricación de estas armas de destrucción masiva sólo nos conducirá a la ruina de la especie y la mayor parte del planeta.
El otro frente de batalla en esta guerra es librado por las compañías petroleras en contra de usted y de mí. Ellos siempre que pueden están comprometidos en estafarnos, mintiendo sobre la cantidad limitada de petróleo que se encuentra bajo la superficie de la tierra. Ellos ocultan que están chupando un hueso pelado. Y, al igual que los magnates de la madera de principios del siglo 20 que solo dejaron una maldición sobre las generaciones futuras, ya que derribaron todos los bosques que tuvieron acceso, lo mismo que hacen el gobierno y los sojeros argentos [RDPRMC], los barones del petróleo no dicen la verdad al público - que hay sólo utilizables unas pocas décadas más de petróleo. Presidente Obama, ahora que usted ha tomado el control de GM, es necesario convertir las fábricas a los nuevos usos y necesidades inmediatamente.
2. No ponga otros $ 30 millones en las arcas de GM para armar coches. En lugar de ello, utilice ese dinero para mantener la actual fuerza laboral - y los que han sido despedidos - para que puedan construir nuevos vehículos de transporte para el siglo 21.
3. Anuncie que vamos a tener trenes rápidos, de larga distancia, que crucen este país en los próximos cinco años. El hecho de que tengamos la tecnología y que no la estemos utilizado, es criminal.
Demos trabajo a los desempleados para crear nuevas líneas de producción en todo el país de estos nuevos trenes. Esto se puede hacer y hay que hacerlo ahora.
4. Iniciar un programa para instalar una infraestructura de un tren ligero de transporte masivo en todas nuestras grandes y medianas ciudades. Construyendo los trenes en las fábricas de GM. Y emplear personas de todo el mundo para instalar y ejecutar este sistema.
5. Para las personas de zonas rurales no comprendidas por estas futuras líneas de tren, las fábricas de GM tienen que producir ómnibus propulsados por energía eficaz y limpia.
6. Usar a las fábricas de GM para fabricar, según modelo argentino, clavos miguelitos para neutralizar a las 4 x 4. [RDPRMC]
7. Transformar algunos inútiles instalaciones de las fábricas de GM para construir molinos de viento, paneles solares y otros medios para generar energía eléctrica sin emisión de CO2. Necesitamos en este momento decenas de millones de paneles solares. Y hay una mano de obra cualificada y ansiosa que puede construirlas.
8. Proporcionar incentivos fiscales para aquellos que viajan en colectivos o tren. Asimismo, los créditos deben estar destinados para aquellos que convierten su hogar a energías alternativas y ahorran energía [RDPRMC].
9. Para financiar todo esto, hay que establecer un impuesto de 8 pesos por cada 5 litros de nafta o similar. Esto incentivará a la gente a ahorrar energía y utilizar las nuevas líneas de trenes y ómnibus que los trabajadores hayan construido para ellos.
Bueno, esto es un comienzo.
Escribo esto en la mañana en que llegó a su fin de la otrora poderosa General Motors.
El Presidente de los Estados Unidos ha hecho oficial: La General Motors, tal como la conocíamos, ha dejado de existir.
Es una triste ironía, la empresa que inventó la "obsolescencia planificada" - hacían coches que se desmoronaban después de unos años para que el cliente tenga que comprar constantemente uno nuevo - se ha hecho obsoleta.
Se negó a construir automóviles de acuerdo a la necesidad de la gente, coches de mejor rendimiento de combustible, con respeto a la seguridad y cómodos en este tráfico tumultuosos [RDPRMC].
GM ha luchado obstinadamente en contra de regulaciones para cuidar el medio ambiente y las normas de mejoramiento de la seguridad vial.
La Automotriz fue un infierno, por el permanente empeño en castigar a sus trabajadores sindicalizados, podando miles de empleos sin otro motivo que no sea, "mejorar" la corporación.
A partir de la década de 1980, cuando GM anuncio su traslado a México y otros lugares, innumerables puestos de trabajos fueron aniquilados y la vida de decenas de miles de personas fue destruida.
Así que aquí estamos en el lecho de muerte de General Motors.
El cuerpo de la empresa aún esta tibio, y me encuentro lleno de alegría.
No es la alegría de la venganza contra una corporación que arruinó mi ciudad natal y trajo la miseria, el divorcio, el alcoholismo, la falta de vivienda, debilidad física y mental por la adicción a las drogas a la gente que creció en ese marco.
Tampoco, obviamente, se siente alegría al saber que más 21.000 trabajadores de GM quedarán también sin trabajo.
Pero usted, yo y el resto de los yankys, ¡poseemos ahora una compañía automotriz!
Lo sé, lo sé – ¿qué humano no quiere ser dueño de una compañía como esta?
Pero... ¿Quién de todos nosotros quiere que $ 50 mil millones de dólares de nuestros impuestos sea arrojado a un agujero negro tratando de salvar a GM?
Seamos claros al respecto: La única manera de salvar a GM es matar a GM.
Sin embargo, otro tema es salvar nuestra magnífica infraestructura industrial y esto debe ser una prioridad absoluta.
Si permitimos el cierre y la demolición de las plantas automotrices, no nos daríamos cuenta lo importante que serían estas para construir sistemas de energía alternativa que ahora se necesitan desesperadamente.
Y cuando nos demos cuenta de que la mejor forma de transportarnos es por ejemplo a través de trenes, trenes ligeros y ómnibus de baja emisión contaminante, ¿cómo vamos a fabricar estos nuevos sistemas si es que hemos permitido que desaparezca nuestra capacidad industrial y su mano de obra calificada?
Por tanto, como la GM esta siendo "reorganizada" por el gobierno federal y el tribunal judicial de quiebra, he pensado en un plan y le pido al Presidente Obama que lo aplique para el bien de los trabajadores, la comunidad de GM, la nación y el mundo todo [RDPRMC]:
1. Igual a lo que hizo el Presidente Roosevelt después del ataque a Pearl Harbor, “el grone” que tenemos de presidente debe informar a la nación que estamos en guerra y urgentemente tenemos que convertir nuestras fábricas de autos en fábricas que construyan vehículos de transporte masivo y dispositivos de energía alternativa. Cómo se hizo en 1942 reconvirtiendo la línea de ensamblaje de GM para construir aviones, tanques y ametralladoras [RDPRMC]. Así es como se derrotó a los fascistas.
Nos encontramos ahora con un tipo diferente de guerra - una guerra contra el ecosistema, al que nos han arrastrado nuestros propios líderes empresariales y gobernantes.
Existen dos frentes de batalla. Uno tiene sus oficinas centrales en Detroit. Los productos construidos en las fábricas de GM, Ford y Chrysler son algunas de las mejores armas de destrucción masiva, responsables del calentamiento del planeta y el derretimiento de los casquetes polares. Los artefactos que llamamos "autos" pueden ser muy divertidos conducirlos y pavonearse en él, pero son como un millón de dagas en el corazón de la Madre Tierra.
Continuar con la fabricación de estas armas de destrucción masiva sólo nos conducirá a la ruina de la especie y la mayor parte del planeta.
El otro frente de batalla en esta guerra es librado por las compañías petroleras en contra de usted y de mí. Ellos siempre que pueden están comprometidos en estafarnos, mintiendo sobre la cantidad limitada de petróleo que se encuentra bajo la superficie de la tierra. Ellos ocultan que están chupando un hueso pelado. Y, al igual que los magnates de la madera de principios del siglo 20 que solo dejaron una maldición sobre las generaciones futuras, ya que derribaron todos los bosques que tuvieron acceso, lo mismo que hacen el gobierno y los sojeros argentos [RDPRMC], los barones del petróleo no dicen la verdad al público - que hay sólo utilizables unas pocas décadas más de petróleo. Presidente Obama, ahora que usted ha tomado el control de GM, es necesario convertir las fábricas a los nuevos usos y necesidades inmediatamente.
2. No ponga otros $ 30 millones en las arcas de GM para armar coches. En lugar de ello, utilice ese dinero para mantener la actual fuerza laboral - y los que han sido despedidos - para que puedan construir nuevos vehículos de transporte para el siglo 21.
3. Anuncie que vamos a tener trenes rápidos, de larga distancia, que crucen este país en los próximos cinco años. El hecho de que tengamos la tecnología y que no la estemos utilizado, es criminal.
Demos trabajo a los desempleados para crear nuevas líneas de producción en todo el país de estos nuevos trenes. Esto se puede hacer y hay que hacerlo ahora.
4. Iniciar un programa para instalar una infraestructura de un tren ligero de transporte masivo en todas nuestras grandes y medianas ciudades. Construyendo los trenes en las fábricas de GM. Y emplear personas de todo el mundo para instalar y ejecutar este sistema.
5. Para las personas de zonas rurales no comprendidas por estas futuras líneas de tren, las fábricas de GM tienen que producir ómnibus propulsados por energía eficaz y limpia.
6. Usar a las fábricas de GM para fabricar, según modelo argentino, clavos miguelitos para neutralizar a las 4 x 4. [RDPRMC]
7. Transformar algunos inútiles instalaciones de las fábricas de GM para construir molinos de viento, paneles solares y otros medios para generar energía eléctrica sin emisión de CO2. Necesitamos en este momento decenas de millones de paneles solares. Y hay una mano de obra cualificada y ansiosa que puede construirlas.
8. Proporcionar incentivos fiscales para aquellos que viajan en colectivos o tren. Asimismo, los créditos deben estar destinados para aquellos que convierten su hogar a energías alternativas y ahorran energía [RDPRMC].
9. Para financiar todo esto, hay que establecer un impuesto de 8 pesos por cada 5 litros de nafta o similar. Esto incentivará a la gente a ahorrar energía y utilizar las nuevas líneas de trenes y ómnibus que los trabajadores hayan construido para ellos.
Bueno, esto es un comienzo.
Por favor, por favor, por favor, no sostengan a GM para que solo sea una versión más pequeña de esa fábrica de armamentos que llamamos Chevys, Cadillacs o Hummer.
Esto no es una solución a largo plazo. No tire su dinero en una mala compañía.
Hace 100 años, los fundadores de General Motors convencieron al mundo para que renuncien a sus caballos, sillas de montar y látigos buggy para crear una nueva forma de transporte. Ahora es el momento de decir adiós a los motores de combustión interna.
Suyo, Atentamente,
Michael Moore
MMFlint@aol.com
MichaelMoore.com
Hace 100 años, los fundadores de General Motors convencieron al mundo para que renuncien a sus caballos, sillas de montar y látigos buggy para crear una nueva forma de transporte. Ahora es el momento de decir adiós a los motores de combustión interna.
Suyo, Atentamente,
Michael Moore
MMFlint@aol.com
MichaelMoore.com
Nota 1: traducción libre de los zombis de la carta del gordo moore (que no se operó como el careta de villariel), usted puede consultar el original haciendo click aquí.
Nota 2: [RDPRMC] quiere decir Resignificación Discursiva por Pro Rotten Middle Class. Con el perdón de Sergio Colautti claro.
Nota 3 : ya que se habla de resignificar, este post es a colación del podrido día del medio ambiente, fue instaurado en 1972, y desde esa fecha hasta hoy nunca se lo destruyó más, así vamos con la conmemoración de "días". Dios quiera que nunca instauren el día de los zombis.
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